29 de marzo de 2007

Mileurismo circunstancial...

Esta mañana, el equipo de redacción de Realidades Paralelas (vamos… yo) ha recibido en su sede social (bueno… en mi casa) un escalofriante testimonio. Lo firma “la mileurista”. Pero no era sobre lo que yo pensaba…

Así que he decidido publicarlo aquí, en este nuevo universo kikeliano... Aprovecho para inaugurar la etiqueta sobre frikitrabajos, que se llama, lógicamente, más triste es de robar...


Hola Kika!
Dicen que en la vida hay muchas friki-experiencias. La mía de ayer estuvo, definitivamente, en el “top ten” de las cosas raras que una hace en la vida. En el “top five”, diría yo. Ayer estuve en un concurso de la tele. Uno de esos de preguntitas y respuestas. Madre mía, qué difíciles eran algunas. Yo no quería ir, si te digo la verdad. No me van nada estas historias. Pero por esas cosas raras de la vida, terminé llegando al estudio, donde me maquillaron y peinaron hasta que estuve monísima. Las maquilladoras y la peluquera, unos encantos. Yo creo que trataban de animarnos. Me contaron que cuando alguien va a la televisión (supongo que cuando no es un concursante de poca monta y es un famosote-VIP de verdad) tardan dos horas en maquillarlo. Qué horror.

En la televisión todo el mundo es encantador. Te mandan mucho, lo controlan todo, pero siempre con una sonrisa. No sé hasta qué punto terminas por convencerte de que haces las cosas porque quieres.

Conocí al resto de los concursantes. En general, eran gente simpática y divertida. Unos parecían encantados de salir por la tele. Otros estaban muy nerviosos. Un tercer grupo estaban como yo, vamos, pensando a ver de qué manera podían salir de allí lo más rápido posible.

Después de comer, a ensayar. En la tele todo está ensayado. Ensayadísimo. Y hay que sonreír sin parar. Entre el maquillaje y la laca del pelo, ya tenía la sonrisa fosilizada. Saluda a esa cámara, no mires al monitor… en ese momento me puse a pensar cómo el estudio era mucho más pequeño y deslucido de cómo sale por la tele. Y dicen que la televisión engorda, pero si yo me veo más gorda de lo que soy, entonces voy a salir más delgada de lo que pienso. Ay, quién me mandaría meterme en esto…

Micrófonos. Me pusieron el micro seis veces, súbete la camiseta, a ver por dónde colocamos el cable. La petaca pesa mucho y se va calentando según pasa el tiempo. Qué miedo. Esto va a empezar. Entra el público. Cien personas, edad indefinida. Nos han dicho que vienen de Oxford, Cambridge y Stanford. Pero creo que no. Le gritan al presentador, parece como si lo conocieran. Pero del público ya te hablarán, Kika.


Me quedo con una frase del día de ayer. "Hay que ver cómo en la tele casi todo es mentira".

Al final, mil euros. Soy mileurista por un mes, lo que no está mal.

Muchos besos y gracias por escuchar mi historia. Te la presto por si la quieres publicar.

La Mileurista.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

jajaja que bueno esto de "si yo me veo más gorda de lo que soy, entonces voy a salir más delgada de lo que pienso".
nunca he ido a un concurso de la tele... pero dudo que pudiese ganar ni mil euros, desde casa es mucho más sencillo, me parece a mi!

Anónimo dijo...

Sí, desde casa es mucho más fácil, no lo dudes... alli toda la realidad se ve de lo más distorsionada...

Besos!

Anónimo dijo...

Querida mileurista,

un honor que hayas contado conmigo para formar parte de tu momento friki del mes, supongo que quedarán más a lo largo del año aunque no sé si a este nivel.

Seguro que quedas monísima y elegantísima en la tele. Nadie tiene tanto charm como tú, darling y si no, pregúntaselo al comodín 2.

Un besín

Anónimo dijo...

Os quiero, comodines. Y lo sabéis, pero yo os lo digo!!!

Besos!