Felicidades Cabeza de Jengibre

Picasso pasó por la etapa azul, la rosa, la cubista. Todos los niños tienen esa época que podríamos llamar marrón, escatológica y asquerosa. Incluso se da algún caso en que hay gente que no la ha superado a cierta edad, cosa preocupante, pero de eso ya hablaremos otro día. O no. Hoy hablamos de épocas, de las mías. Ahora estoy inmersa en una surrealista, girada y boca abajo. A veces me gusta tumbarme en el sofá con los pies sobre el respaldo, me da cierta perspectiva interesante. Pero es que últimamante, en esta mi etapa absurda, las absurdeces me asaltan. Se me suben a los brazos y me piden que las abrace, como ésta que os voy a contar.

Últimamente la versión digital del diario 20 Minutos se ha convertido en mi lectura de cabecera y hoy leía esta noticia. Al parecer en Inglaterra se celebran carreras de ovejas. Hasta ahí parece extraño, solo un poquito de momento. Pero sigo leyendo y llego al tema de los jinetes, porque al parecer, necesitan jinetes, quién sabe por qué. Nada de enanitos presidiarios como en el Mago de Oz o duendes como en ese capítulo de los Simpson. Hay algo aún más absurdo, agarrado a la lana va .... un oso de peluche. Increíble pero cierto. La gente se aburre tanto que ponen a su osito de peluche a cabalgar (¿ ovejalgar?) sobre una oveja. Nada de chistes como el de por qué llora Frosties, el del supertomate, el oso polar o similar. Nada de frases irreproducibles de reuniones de partido o borracheras de glucosa. Si alguien quiere hacer algo absurdo con su vida que se apunte a las carreras de ovejas. Yo ya le estoy buscando montura a mi gusiluz...

Por cierto, para los que os gusta rizar el rizo, la ganadora en esta ocasión fue Cabeza de Jenjibre. ¿ Iría cabalgada por un muñequito como los de la foto?